Eximcruz es una empresa agrícola boliviana que se dedica a la cosecha y comercialización de la nuez amazónica. Una actividad importante porque, además de garantizar unos ingresos dignos a la población local, contribuye a proteger la selva amazónica.
Eximcruz es una empresa agrícola boliviana que se dedica a la cosecha y comercialización de la nuez amazónica. Una actividad importante porque, además de garantizar unos ingresos dignos a la población local, contribuye a proteger la selva amazónica.
La dificultad a la hora de hallar una fuente de ingresos en la Amazonía boliviana lleva a que muchas de las comunidades locales participen en la deforestación de la selva amazónica para buscarse un medio de subsistencia. A este respecto, la nuez amazónica representa una vía prometedora, tanto para las personas como para el medioambiente.
De hecho, la nuez amazónica (Bertholletia excelsa) crece en una especie arbórea que se encuentra entre las más antiguas de la Amazonía. Estos árboles centenarios, dotados de una biología extremadamente compleja, no crecen en ningún otro lugar fuera de la selva amazónica. En la actualidad, la cosecha de las nueces representa el 75 % de la actividad económica de la región amazónica boliviana, lo que la convierte en una fuente de ingresos esencial para la población indígena, además de en un estímulo para preservar la selva.
Eximcruz es una empresa que ayuda a la población local a comercializar sus cosechas de nueces. La organización desempeña un papel social y medioambiental esencial: proporciona unos ingresos justos a la comunidad indígena, al tiempo que contribuye a preservar el ecosistema amazónico. A este respecto, lleva a cabo múltiples actividades a lo largo de toda la cadena de valor de las nueces amazónicas:
Desde 2017, Alterfin ha respaldado con diversos préstamos el crecimiento de Eximcruz. De este modo, se ha convertido en su segundo prestamista internacional:
«Alterfin nos ha ayudado mucho a promover el desarrollo socioeconómico de nuestra zona de actividad y a crear más empleos directos e indirectos. Su apoyo nos ha permitido aumentar la capacidad de compra de materias primas para responder a una demanda cada vez mayor de nuestro producto, lo que ha derivado en un incremento de los ingresos de los recolectores indígenas.»
Durante la pandemia, y al contrario que otros prestamistas, Alterfin renovó su financiación con las mismas condiciones para ayudar a Eximcruz a hacer frente a las dificultades derivadas de la crisis:
«La rapidez de decisión y de desembolso de Alterfin permitió a Eximcruz mantener su actividad y respaldar a los recolectores de nueces y al personal de las plantas de transformación.»
Para validar su estrategia, Alterfin ha llevado a cabo una evaluación en profundidad sobre su papel como inversor social y sobre el impacto socioeconómico de Eximcruz para sus beneficiarios. Nuestros equipos han conversado con el equipo de Eximcruz y han mantenido 100 entrevistas, tanto con los recolectores de nueces como con las mujeres que trabajan en las plantas de transformación. Estas entrevistas confirman que Alterfin sigue desempeñando un papel fundamental en el ámbito de la inversión de impacto. Si desea leer la evaluación completa:
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